NTRODUCCIÓN
En los últimos años se ha producido un importante avance
en el diagnóstico y tratamiento de la epilepsia. Los avances en
el conocimiento de los mecanismos básicos de la epilepsia, el descubrimiento
de los genes responsables de determinados síndromes y enfermedades
epilépticas, el desarrollo de nuevos fármacos antiepilépticos,
el avance en las técnicas de neuroimagen y fundamentalmente el
desarrollo de las unidades de epilepsia han permitido mejorar la atención
que se realiza al paciente epiléptico.
Los orígenes de dichas unidades se remontan a la década
de los 50 y 60, cuando desarrollaron su trabajo algunos de los padres
de la epileptología actual , tales como Penfield y Jasper en el
Neurological Institute de Montreal o Bancaud y Tailarach en el Hospital
de Saint-Anne de París. En este sentido, en 1992 existían
más de 100 centros en Norteamérica con unidades de epilepsia
y programas de cirugía. En el momento actual las unidades o centros
de epilepsia y los programas de cirugía de epilepsia se hallan
integrados en la mayoría de los servicios de neurología
de los países desarrollados.
En España las primeras unidades de epilepsia aparecen a finales
de los 80. Desde entonces diversas unidades han aparecido en las principales
comunidades del país. Así en el momento actual Madrid, Cataluña,
País Vasco, Andalucía, Navarra y Galicia cuentan al menos
una unidad de epilepsia, con un programa de cirugía asociado. La
importancia de las unidades de epilepsia viene justificada por varias
razones:
1. Criterio demográfico: La epilepsia
constituye una entidad que afecta al 0.6 % de la población y la
incidencia anual de epilepsia es aproximadamente de 38/100.000 habitantes.
El porcentaje de pacientes farmacoresistentes suele situarse en torno
al 20%. Un 5% del total de pacientes con epilepsia serán candidatos
a cirugía. Traducidos estos términos en las cifras poblacionales
de la Comunidad Valenciana (4.000.000 habitantes), representa una prevalencia
de 24.000 pacientes epilépticos, con una incidencia anual de unos
1520 nuevos casos. De este colectivo de pacientes alrededor de 4800 pacientes
serían farmacoresistentes y el número de candidatos a cirugía
de epilepsia sería de unos 1200 pacientes.
2. Perjuicio para el paciente, por la morbilidad
física y social que implican tanto las crisis epilépticas
como los efectos secundarios producidos por los fármacos antiepilépticos
empleados. Además, se ha observado un incremento de la mortalidad
en pacientes con epilepsia y un mayor riesgo de muerte súbita.
Las posibilidades de control de la enfermedad son muy elevadas con una
optimización del diagnóstico y el tratamiento.
3. El coste económico que supone la epilepsia,
así por ejemplo en 1998 el coste de la epilepsia en España
fue de unos 11.300 millones.
PROYECTO DE
UNIDAD DE EPILEPSIA EN EL HOSPITAL LA FE
En este marco surge
el proyecto de unidad de epilepsia del Hospital La Fe, como un centro
de referencia en la Comunidad Valenciana con los siguientes objetivos
y servicios:
1. Programa
de diagnóstico: Dotación con suficiente tecnología
para poder diagnosticar una epilepsia frente a otro tipo de trastornos
paroxísticos no epilépticos, así como poder diagnosticar
el tipo de epilepsia de cualquier paciente con el fin de optimizar las
medidas terapéuticas en los mismos.
2. Programa de tratamiento: Ofrecer todas las
posibilidades de tratamiento médico existentes, tanto con los fármacos
convencionales como con fármacos en experimentación, así
como en tratamientos alternativos de la epilepsia. Disponer de todos los
medios necesarios para poder aplicar un tratamiento quirúrgico
de la epilepsia en aquellos pacientes en que fuese necesario (cirugía
resectiva, paliativa e implantación de sistemas de estimulación
cerebral)
3. Programa docente e investigador: Constituirse
como un centro modelo en el territorio nacional en cuanto a docencia e
investigación, capaz de asegurar la formación en epilepsia
de nuevos médicos, la publicación de trabajos científicos
y la realización de proyectos de investigación.
FUNCIONAMIENTO
En el momento la normativa existente para el funcionamiento de una unidad
especializada de epilepsia, queda determinado por el Plan Estratégico
Nacional para el Tratamiento Integral de las Enfermedades Neurológicas,
publicado por la Sociedad Española de Neurología, la normativa
de la Academia Europea de Epilepsia, las recomendaciones de la Academia
Americana de Neurología sobre monitorización Vídeo-EEG
y las recomendaciones de la Agencia de Evaluación de Tecnologías
Sanitarias del Ministerio de Sanidad y Consumo de España. En síntesis
estos son los recursos mínimos exigidos:
RECURSOS HUMANOS: Epileptólogo con formación
acreditada, neuropediatra, neurólogo, neurocirujano, neurofisiólogo,
neurorradiólogo, psiquiatra, neuropsicólogo, especialista
en medicina nuclear, neuropatólogo, anestesiólogo, técnicos
o enfermeras con formación específica en video-EEG y asistente
social
RECURSOS MATERIALES: Unidad de monitorización
video-EEG con equipos de vídeo-EEG y estimulador cortical. Se ha
de tener acceso a Resonancia magnética (al menos de un equipo de
1.5 Teslas), equipo para la realización de arteriografía
digital (prueba de Wada), gammacámara (SPECT cerebral) y equipo
de PET cerebral.
ORGANIZACIÓN
Siguiendo las recomendaciones y normativas citadas en cuanto a la dotación
de medios y personal, el proyecto de unidad de epilepsia del Hospital
La Fe propone un modelo de atención integrada de los pacientes
epilépticos. Todos aquellos pacientes fármacoresistentes,
que no pudiesen ser controlados en sus hospitales de área, podrían
ser remitidos para su valoración. En este modelo la organización
de la atención al paciente epiléptico quedaría estructurada
de forma piramidal. Así los neurólogos y pediatras de zona
remitirían los pacientes en los que no se alcanzase un buen control
a su hospital de área que constituiría el filtro fundamental
de enfermos, en los cuales los neurólogos o pediatras determinarían
qué pacientes han de ser enviados para su valoración en
la unidad de epilepsia. La unidad de epilepsia del Hospital La Fe tendría
dos grandes líneas, niños y adultos, integradas y estructuradas
en tres niveles de atención.
Nivel 1: Inicialmente los pacientes serán
valorados por el equipo clínico especializado en epilepsia de los
servicios de Neuropediatría o de Neurología de adultos.
A los pacientes se les solicitarán las exploraciones complementarias,
que en un primer escalón serán realizadas por los servicios
de neurofisiología (estudios EEG de corta duración) y neuroradiología
(RM de epilepsia).
Nivel 2: En los pacientes en los que no se pueda
resolver su problema con la valoración clínica y exploraciones
del nivel 1, será necesario solicitar un estudio Vídeo-EEG,
con el fin de registrar crisis epilépticas en el paciente. Se requerirá
el ingreso del paciente entre 3 y 7 días y en la mayoría
de los casos la retirada de la medicación antiepiléptica.
Este estudio será realizado por un epileptólogo y tendrá
3 objetivos:
- Diagnóstico
de epilepsia frente a otras entidades
- Diagnóstico
sindrómico de epilepsia y caracterización de crisis
- Valoración
de todos aquellos pacientes candidatos a cirugía
Realizada toda la valoración (niveles 1 y/o 2) los pacientes dispondrán
de un diagnóstico y se les aplicarán las siguientes opciones
terapéuticas:
- Pacientes en los
que se excluya el diagnóstico de epilepsia: Podrán ser
valorados por otros servicios según el problema del paciente,
tales como psiquiatría (crisis psicógenas), cardiología.
Esta valoración se podrá realizar tanto en el Hospital
La Fe como en el hospital desde donde se remita.
- Pacientes en los
que se haya diagnosticado su tipo de epilepsia o se hayan caracterizado
sus crisis: Se podrán determinar las opciones farmacológicas
más adecuadas, que podrán ser ofrecidas tanto en la Unidad
de Epilepsia o bien en su hospital de área.
- Pacientes valorados
como candidatos a cirugía: Los pacientes serán valorados
en sesión clínica de la unidad de epilepsia, en la cual
participarán todos los miembros de la misma. Los pacientes considerados
como buenos candidatos a cirugía tras los estudios realizados
serán remitidos al nivel 3. Aquellos pacientes a los que no se
considere como buenos candidatos se optimizará el tratamiento
médico. En determinados pacientes se deberá realizar otras
exploraciones (SPECT cerebral crítico, PET cerebral o prueba
de Wada) para determinar si son buenos candidatos, previamente a la
fase 3.
- Nivel 3: Los pacientes
serán intervenidos quirúrgicamente siguiendo una de los
siguientes procedimientos.
- Intervención sin estudio invasivo: se aplicará para
la mayoría de pacientes en los que se realice cirugía
resectiva, en los que se realice cirugía paliativa y en los que
se implante un sistema de estimulación cerebral.
- Intervención con estudio invasivo: en un 10-20% de pacientes
será necesario recurrir a un estudio con electrodos invasivos
o intracraneales, con el fin de delimitar adecuadamente la resección
o evitar la resección de áreas elocuentes.
CONCLUSIÓN
La realización del proyecto de unidad de epilepsia del Hospital
La Fe permitiría la constitución de una unidad de epilepsia
al nivel de las existentes en otras partes de España y supondría
un importante ahorro económico, derivado de la mejora en la atención
al paciente con epilepsia y de la suspensión en la remisión
de pacientes para su valoración a otras comunidades con unidades
de epilepsia.
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